Etiqueta: Melanio Escobar

  • De la represión a la acción

    De la represión a la acción
    Fuente: Tal Cual

    Durante un mes hemos visto una represión brutal por parte de los efectivos de seguridad del Estado en contra de la sociedad civil que sale a reclamar sus derechos, que sale a las calles de manera pacifica, democrática y constitucional a decirle en su cara a la dictadura, que no los queremos más que debemos tener elecciones, que queremos a los presos políticos fuera de reclusión, que queremos se abra un canal humanitario para subsanar un poco la terrible escasez de medicinas y alimentos que no queremos más muertes, que queremos una vida normal, queremos peos normales. Ya basta de estar sometidos ante el totalitarismo que por cualquier mediotrata de permanecer en el poder, siendo unos pocos, su cúpula corrupta y asesina los que pueden vivir en la catástrofe más grande que ha sufrido la república.

    Desde la ONG que dirijo, RedesAyuda, y en el marco de nuestro proyecto periodístico Humano Derecho, hemos registrado, no solo las voces de la sociedad civil en las calles, sino el actuar ilegal por parte de la GN/PNB en el área del control de manifestaciones, quienes han venido utilizando los métodos no letales» de dicho marco de control para todo lo contrario: causar el mayor daño posible. En el mismo parte del Ministerio Püblico se denuncia la muerte de un adolescente el 26 de abril en El Valle por asfixia a causa del uso excesivo de gas lacrimógeno en una manifestación. Ya quedará por parte del Ministerio Público darle conclusión al asesinato del joven Pernalete de la Unimet, los testigos señalan que murió por la consecuencia del impacto a quemarropa de una bomba lacrimógena. Y es que en rueda de prensa, 7 ONG de Derechos Humanos hicimos la denuncia, con pruebas irrefutables y que están disponibles a consulta en nuestro sitio web www.redesayuda.org, que estos efectivos disparan de manera horizontal estos gases para – y repito- causar el mayor daño posible a quienes en la calle expresan sus ideas, a quienes su perfil democrático no les permite concebir una Venezuela distinta a una en libertad.

    Ese día fijamos nuestras exigencias y condiciones básicas para recobrar el hilo democrático, tiene que haber respeto al Parlamento tenemos que estar sin un Tribunal Supremo de Justicia parcializado y a merced del Ejecutivo, tiene que haber elecciones, y es que es claro que sin Parlamento que represente la voluntad de los ciudadanos no puede haber democracia, y sin democracia no hay derechos humanos. Habiendo dicho esto, lo que se viene advirtiendo es ahora una realidad: vivimos en dictadura y como sociedad tenemos que luchar por los principios democráticos, de la forma en la que hemos venido haciéndolo, pacifica pero con firmeza, siempre con nuestros valores y la verdad de nuestro lado. Nosotros podemos, somos más. 


  • Fanzine Nº 2

    EDITORIAL | Somos tú

    Poder hacer cosas innovadoras en Venezuela cada vez es mas difícil. Las precariedades de un sistema que está destruido por quienes fueron electos para construir, ha hecho de comunicar una tarea titánica. Aun así, todo lo malo que nos está pasando no es excusa para la mediocridad o para cruzarse de brazos hasta que las cosas mejoren. Es, en efecto, un incentivo a la creatividad, una imposición a mejorar. No podemos seguir confundiéndonos entre los que sin alma caminan por las calles: debemos buscar destacarnos y, sobre todo, alzar nuestra voz por cualquier medio posible.

    Es por esto que, luego de 4 temporadas en Humano Derecho Radio hemos decidido ir a su versión 2.0, llevarlo mas allá. El primer intento fue con la primera versión de este fanzine, que nos ha permitido ir hasta las manos de quienes buscan una forma diferente de ver las cosas, un producto final de calidad con la vieja estética y formato que en nuestros años más mozos nos apasionaban. Para ir mas lejos, decidimos proponernos la tarea de crear un espacio donde no sólo sean nuestras voces las que logren llegar hasta tus oídos, sino la de todas las personas que están buscando hacer un cambio. De ahora en adelante en nuestra pagina web www.humanoderecho.com encontraran una propuesta diferente, amena y llena de contenido en audio: Ya no somos un programa, somos un megáfono de la sociedad, somos una radio estación.

    Si estas cansado de la cultura de violencia que nos mantiene encerrados en nuestras casas, si te molesta la hegemonía comunicacional del Estado, la cual sigue apuntando como culpables de esta crisis al imperio norteamericano, la CIA, los empresarios, los liderazgos políticos, el paramilitarismo, la iguana, el niño o cualquier tontería que se inventen con tal de no asumir su responsabilidad; si estas en contra de las injusticias y quieres reforzar la verdad, si estas interesado en sumergir tu mente en la actividad social; si no toleras mas contenidos vacíos de farándula y cocina cuando en nuestro país no hay ni comida, entra en la web, prende la radio y se parte de esto.

    Somos los sobrevivientes, los que quedamos, por las razones que sean. Estamos acá y mientras lo estemos, daremos la lucha contra la dictadura del siglo XXI y quienes la sostienen. Con investigación, análisis, con contenido, con asistencia y protección, con las ganas de sacar a una nación adelante. Somos los obreros, los maestros, los científicos, los cultores, somos la calle, el barrio, la urbanización y la quinta, somos quienes quieren y hacen el cambio, somos tú y estamos juntos.

    Cuando el hampa es la cultura, los Derechos Humanos somos la contracultura. Esto es Humano Derecho Radio Estación.

    Melanio Escobar @MelanioBar


  • Fanzine Nº 1

    EDITORIAL: El último de los mohicanos

    Desde hace un tiempo se cree que vivir en Venezuela y representar su lucha viene siendo un acto de valentía y coraje, cuando para muchos de nosotros no existe otra opción que hacerlo. No hay más opción que pasar nuestros días sorteando criminalidad, inflación, falta de oportunidades y aceptar ningún tipo de proyecto futuro. Me he dado cuenta que, ninguno de los que nos quedamos somos héroes de la patria y tampoco los que se van son luchadores por enfrentar el exilio. Pareciera injusto, pero es así, ya que el hecho de estar en el país y trabajar por él no tiene que ver con el código postal que define tu dirección. Tampoco tiene que ver con la duración de tu pasaje, tus ahorros, o tu trabajo, con lo que sí tiene que ver es con que lleves a Venezuela en el corazón y pelees por ella desde cada rincón del planeta, eso incluye Montalbán, Petare, Bogotá y Recoleta.

    Permanecer en el país es un asunto mental, y puedo entender al que se va. La vida es otra y las oportunidades de esparcimiento/crecimiento que te ofrece estar dentro de un sistema democrático y relativamente normal son tan variopintas que cualquiera se desconecta de sus raíces, en cierto punto, es sano. Esto pasa igual estando en dictadura, muy a pesar de los constantes problemas hay quienes deciden simplemente caminar sus días ignorando el fuego que le va quemando los pies, haciendo de ojitos locos ante la hambruna, la arbitrariedad y la muerte. Esos, tampoco viven en Venezuela, pero como dije antes, los que si vivimos en ella estemos dentro o fuera de su frontera, tenemos la ardua tarea de levantar la moral, de ser contestatarios, de no dejarnos pisar ni mirar como pisan a otros, esos, nosotros los que vivimos en Venezuela, dentro y fuera de ella, somos los últimos de los mohicanos, los que decidimos vivirla entera y luchar por ella.

    En esta oportunidad, desde Alemania te mostramos el arte que refleja la historia que los supermercados del país repiten: la manipulación y el control social de la comida. Este arte tiene la intención de despertar las ideas en el mundo y voltear los ojos hacia este gran problema. Así como también, te mostramos a los que desde nuestra frontera día a día generan cambios y espabilan las conciencias todas las semanas; a través del programa de radio le damos vocería al que representa la voz de tantos que han sido tratados de ser callados, le damos durante media hora el espacio para que se expresen y motiven a otros con su ejemplo. Quedamos pocos y de eso se trata en estos momentos, no de cantidad sino de calidad, somos los sobrevivientes del apocalipsis, somos música, arte, cultura y activismo, somos la resistencia cívica a la dictadura, somos Humano Derecho.

    Por Melanio Escobar – @MelanioBar


  • El huracán Maduro

    El huracán Maduro
    Fuente: Tal Cual

    Mientras que la selección nacional juega contra Brasil en Mérida, periodistas de la fuente futbolística que acompañan a la Canarinha tuitean fotos de cómo en el baño del estadio, donde se lleva acabo el partido, la gente tiene que lavarse las manos en un tobo porque el agua corriente simplemente no existe. Al mismo tiempo, en la hermana República de Colombia, donde me encuentro en estos momentos completando unos proyectos académicos con la Universidad del Rosa rio, no solamente es que siempre existe el servicio de agua sino que es potable, puedes darte una ducha y al mismo tiemp0 saciar la sed, o puedes hacer unas arepas con harina PAN hecha aquí en Colombia y mezclarlas directamente del grifo de la co cina; detalles que conforman lo que significa lo mínimo de calidad de vida que un ser humano debería tener garantizado. Afortunadamente, no es la primera vez que salgo del país pero el nivel «extra» de sorpresa se agrega por el hecho de ser fronterizos, por tener tanto en común, por quedar a menos de 2 horas en avión y que existan diferencias tan abismales entre los dos. Aunque no es gratis. Colombia estuvo muy mal, muy muy mal por mucho tiempo, pero decidieron cambiar, poner manos a la obra, derrotar a sus demonios políticos, sociales y económicos por todos los lados, en espe cial desde la sociedad civil. El comportamiento de los ciudadanos es fundamental para el desarrollo en progreso de esta nación. 

    Un ejemplo claro: luego de la victoria del NO en el plebiscito, ves cómo comunidades de todo tipo, miembros activos de la sociedad civil han organizado y han hecho una gran variedad de actos, manifestaciones pacíficas, marchas, encuentros y demás formas de demostrar su voluntad por el SÍ a pesar de haber resultado perdedor en la votación. Ese tipo de actitud genera cambios, crea ronchas en las cúpulas de poder, obliga a cambiar decisiones, actitudes y va moldeando una sociedad. No se trata de imponer un pensamiento sobre otro y, la verdad, no sé si estas acciones lograrán algo en cuanto al acuerdo de paz en Colombia. Lo que sí sé es que luchan por lo que creen correcto, sin pisotear a nadie, mostrando su punto de vista, su preocupación y tomando acción para abatir y eliminar de una buena vez la desmotivación. 

    En Venezuela debemos aprender de este ejemplo. Por más que el caos y la destrucción nos rajen la cór nea en cada esquina, tenemos que conseguir la forma de sumar todas nuestras voluntades sin tener que esperar una dirección partidista para eso. La sociedad civil es suficientemente fuerte por sí sola; no tendría que seguir agendas ni limitarse a las convocatorias. Podría mostrar el camino que hay que seguir para lograr la libertad que tanto anhelamos, la que el gobierno de Ni- colás Maduro, su predecesor Hugo Chávez y esa pandi- lla de delincuentes que los han rodeado por tantos años nos ha quitado para conseguir que Venezuela vuelva a ser la reina consentida de América Latina, para que vuelva a ser nuestra Venezuela bonita.


  • El viagra de Maduro

    El viagra de Maduro
    Fuente: Tal Cual

    Hace par de días el presidente Nicolás Maduro en una nueva demostración de la desconexión total que posee con los problemas que los venezolanos atravesamos, hizo mofa en televisión nacional abierta, del ya popular slogan de calle para referirsea la miseria y hambruna generada por la gestión de gobierno que reza «La Dieta de Maduro». En esta oportunidad se le ocurrió preguntarle a una de las focas enchufadas que suelen acompañarle en sus eventos que ¿Por que estaba tan flaco?, el sujeto al cual se le cuestionaba su peso, trató de hacer una mímica de que está trotando para mantenerse en la linea, pero los de menos rango que estaban en el lugar no desaprovecharon la oportunidad y con todo el merito que requiere el valor empleado le gritaron desde el publico la verdad al dictadorzuelo de dos papadas: «La dieta de Maduro». Este acto subversivo tan cerca de él, lo pongo al mismo nivel de importancia que el de «Villa Rosa» en Nueva Esparta. Cada vez le sacude la realidad un poco más cerca de la cara al responsable de esta crisis que condena a todos por igual, el verdadero socialismo, la verdadera equidad social, el hambre generalizada cortesia de la revolución bolivariana. 

    Mientras que las babas de la ausencia de carisma de dos metros que algunos llaman ‘Comandante en Jefe’ salían las palabras: «La dieta de Maduro te pone duro, sin necesidad de Viagra». Millones de venezolanos nos indignábamos al ver y escuchar tanta indolencia y cinismo ante una realidad que agobia a millones de venezolanos. Para el que vive en el país de las maravillas, o sus ojos sólo sintonizan VTV, la empresa consultora ‘More Consulting’ soltó unos datos bastante alarmantes que no sólo confirman lo que podemos ver en la calle de gente comiendo en la basura, sino tam bién nuestros familiares o nosotros mismos más delgados; casos graves de desnutrición, o cualquiera de los escenarios que semana a semana vamos relatando en nuestras paginas y espacios de incidencia, sino que confirman que el Gobierno nos está matando. En estos datos, disponibles a consulta abierta, divulgados por la mayoría opositora de la Asamblea Nacional, un promedio de 14,4 millones de venezolanos comen solamente dos veces al dia. También que la cantidad de personas que se ven «beneficiadas» de comida CLAP es la misma cantidad de gente que admite haber comido residuos de la basura de establecimientos comerciales. No estamos hablando de situación de calle, no estamos hablando de drogadic ción, son padres, madres y familias que recurren a la basura para calmar a su estomago. 

    La mitad de las ausencias escolares tienen que ver con asuntos relacionados a la alimentación, la mitad de los encuestados han tenido que faltar a clase un día por simplemente no tener comida con la cual susten tar las energías que requiere enfrentar la calle. La gente se debilita física y mentalmente, mientras que Nicolás en televisión se burla y sus jalabolas le aplauden. Como dijo el Presidente, sin necesidad de viagra la dieta de Maduro te pone duro, y sin necesidad de vaselina el Gobierno te coge todos los santos días. 


  • Infrarojo

    Infrarojo

    El Unico programa de television en Venezuela por la señal de PUMA TV que trasmite rock, punk, metal, gothic, death, black, anarkopunk, neopunk, hardcore etc etc etc en todos sus formatos conducido por Walter-Melanio y Susana.

    www.myspace.com/infrarojo


  • Donald Rafael Trump Frias

    Donald Rafael Trump Frias
    Fuente: Tal Cual

    Me declaro aficionado de la política: escuchar planteamientos y que sean refutados o aceptados, escuchar de la voz que representa cada candidato cómo haría para resolver esto o aquello. Es interesante, siento que alimenta, que nutre nuestra capacidad de ver las cosas del día a día con otra óptica. Nos permite abrir la mente y entender cómo funcionan algunas cosas más allá de nuestra propia concepción, del cómo debería ser, a lo que realmente son. En fin, me calé la hora y media del debate de Clinton contra Trump.

    Pude ver lo que era básicamente la ejemplificación perfecta de la lucha por la igualdad: vi a una mujer extremadamente calificada para este cargo; además, tener que soportar los desaciertos y patanerías de un hombre que no tiene la preparación para el trabajo. En este primer encuentro fuimos espectadores en esos dos rostros de quién podría ser el nuevo líder del mundo libre. La política mundial, te guste o no, depende mucho de por quiénes voten los ciudadanos norteamericanos en estas futuras elecciones. Clinton propuso, explicó, debatió consigo misma, con la opinión pública pero nunca con Trump. El debate es un choque de ideas con la búsqueda de convergir hasta llegar a la respuesta correcta. Donald nunca tuvo más que prepotencia, ignorancia, arrogancia, mentiras y carisma. Me hizo recordara Chávez. Entre risas comentaba las similitudes que le encontraba con el magnate… Hasta eso, el dinero. Pero mientras más puntos de encuentro conseguía entre estos dos personajes, algo comenzaba a marcar distancia entre ellos, algo que no tiene Trump, pero que sí tenía Chávez: el miedo. 

    El republicano es una demostración de egolatría carismática que, en su ensimismado delirio de grandeza, no teme escupir locuras y mucho menos defenderlas ante un contrincante poderoso que podía -y pudo- barrer el piso con él en televisión mundial. En cambio, Hugo Chávez no aguantó mucho después de ganar la presidencia para desistir ante los debates públicos de sus ideas. Lleno de mentiras e intenciones ocultas tuvo que distanciarse de la confrontación, pues como todo cobarde, el único sitio donde se sentía cómodo para plantear cualquier cosa, era frente a su círculo de aduladores tarifados con cargos de gobierno, o frente a un pueblo cegado por la fantasía de la retórica, la revancha, la venganza y el odio sembrado.

    Con refranes causó momentos épicos, como el famoso: «águila no caza moscas». Pero más de depredador hubiese sido acorralar a la presa y comerla, pegarle un grito y dejarla quieta como hizo con aquella frase. La verdad, es que a Hugo le daba mucho miedo enfrentar la realidad porque lo más probable es que entre tanto engaño, promesas y corrupción no hubiese sabido identificar la línea que separaba todo. Lo más seguro es que estuviese consumido por su propio discurso, que vivía en aquella Venezuela que solo existía en su cabeza. Ojalá que los que decidan el futuro presidente de los Estados Unidos de América sepan verse en este espejo. Les digo: vengo del futuro y no es nada bonito


  • Venezuela en dictadura

    Venezuela en dictadura
    Fuente: Tal Cual

    Para quienes hemos vivido durante más de 17 años los golpes constantes de una caída al vacío sin fondo -que es el deterioro social y de libertades que llamamos nuestra patria- pareciera sencillo leer el título de esta columna en voz alta como algo natural y de antigua data, conocido por todos y fácil de argumentar, hasta inclusive tácito, pero no, no lo fue hasta que el dictador Nicolás Maduro, en la utilización mezquina del poder judicial y electoral, frena toda posibilidad que tiene la sociedad venezolana de resolver sus problemas por las vías pacíficas, de consulta, constitucionales y democráticas.

    Oficialmente y con mucha tristeza, las organizaciones sociales y de derechos humanos nos hemos visto en la obligación de declarar ante el país el carácter anti democrático y dictatorial en el que nos encontramos su mergidos gracias al gobierno revolucionario, que ahora es reconocido nacional e internacionalmente como una dictadura. En ese mismo orden 54 ONG le refirieron una carta al secretario general de la OEA, Luis Almagro, solicitando la reactivación de la carta democrática interamericana al gobierno venezolano, y mientras esto se anunciaba públicamente, podíamos ver a través de algunos enlaces de internet o por el servicio de VivoPlay, la sesión de la Asamblea Nacional donde la mayoría de diputados -electos por el pueblo- hacían una apertura de juicio político contra Nicolás Maduro.

    No es mi intención hacer de cronista de estas acciones, aunque algunas veces me he visto en la obligación de ser partícipe desde la organización que dirijo: @RedesAyuda. Lo que sí deseo que sea completamente intencional en esta columna, es recordarle al lector que no está solo, que aunque los problemas que nos agobian diariamente parecen interminables y que cada día el autoritarismo se profundiza, todavía hay un sector político, social y humanista que trata de re- solver, por los canales pacíficos y democráticos, este escenario de conflictividad tan grande que abraza nuestro país. Que muy a pesar de que el Alto Mando Militar, en una alocución en cadena nacional comandada por Padrino López nos confirme que esta es una dictadura cívico militar, debemos recordar que estos militares no están preparados para la democracia; que nuestros métodos cívicos no entran dentro de su escasa mente que solo está adecuada para la corrupción, el atropello y la criminalidad; que aunque nos traten de amedren tar con grupos violentos asaltando espacios de debate y pensamientos, nuestra gran arma jamás podrá ser igualada y mucho menos socavada. Somos dueños de la razón, de la verdad, de la justicia y de la historia. Así que nuevamente, lector, repito, no estás solo, no estás solo en el padecer y mucho menos estarás solo en el camino que implica la democratización de Venezuela, y que una vez que logremos recuperar el hilo democrático roto por la dictadura de Maduro, necesitaremos de ti, de mí y de todos para volver a darle un sentido a la existencia de la nación. Enfrentamos tiempos oscuros, pero esa misma oscuridad enfrenta lo único que puede derrotarla, nuestra luz.


  • Soy civil, no militar

    Soy civil, no militar
    Fuente: Tal Cual

    Comienzo la columna de esta semana con la frase de Laboratorio de Paz, una ONG que entre varias cosas trata el tema de la militarización de la sociedad venezolana. Esto es un problema que cada vez se hace más arbitrario y poderoso debido a que pareciera que el Ejecutivo no tiene ningún tipo de control sobre la Fuerzas Armada Nacional, a decir verdad, lo que pareciera es que el presidente Maduro responde órdenes directas del alto mando militar. El comité de Derechos Humanos de la ONU ya ha hablado de esto con anterioridad, en su informe del año pasado criticó fuertemente que el Estado venezolano utilizara jurisdicción militar para juzgar a civiles. En ese mismo informe le recomendó que eliminara las posibilidades de que esto sucediera, obviamente ante los acontecimientos actuales se hace evidente que nuevamente el Estado hace caso omiso a este tipo de recomendaciones, y que el defensor del pueblo no se pronuncia alto y claro ante estas violaciones a los derechos humanos.

    Para dejar en claro de qué hablo, toco el tema que está en las redes sociales y del cual aun no se tiene mucha claridad debido a las irregularidades que le rodean; sobre los 3 profesionales de la comunicación que están por enfrentar un juicio militar por producir un video para el partido político Primero Justicia en el cual se muestra a un sujeto vestido de Guardia Nacional recibiendo mensajes en su celular proveniente de su hija donde le habla sobre la crisis que vivimos todos los venezolanos, esto justo cuando el militar se encuentra enfrente de una manifestación pacífica. A modo personal, me pareció una excelente pieza audiovisual que para nada incita a la insubordinación, en cambio muestra que, tristemente son más los puntos que nos unen que los que nos separan y que es momento de buscar un factor de cambio favorable para todas y todos. El Gobierno, y más aún el mando militar, no lo ve así. Es por esto que, apoyados en el Sebin han comenzado la cacería de estos jóvenes.

    El servicio de inteligencia ha servido de brazo verdugo de la ira militar, tomándose atribuciones que son del Ministerio Público, como el hecho de tomar declaraciones, intentar ejecutar arrestos sin orden judicial física y firmada, en fin, si el Estado pretende permitir que a los civiles se nos trate como militares, nos están sometiendo a la militarización de ámbitos netamente civiles dónde no se puede responder a una lógica jerárquica, dónde no hay espacio para la crítica o la disidencia, la política y las ideas no pueden responder a seguir ordenes, no pueden estar sometidos al respeto del superior, eso es autoritarismo. Con estas actitudes estamos siendo sometidos a una dictadura de facto. Como sociedad, no nos queda más en estos casos, que alzar nuestra voz y exigirle al presidente de la República que haga respetar la Constitución, al defensor del pueblo que hable por nuestros derechos humanos y al resto del mundo decirle que a Venezuela la quieren convertir en un cuartel, lo cual, no vamos a permitir.

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  • Venezuela sí puede ser

    Venezuela sí puede ser
    Fuente: Tal Cual

    Hace unos días en Humano Derecho, el programa de radio web que conduzco con Rafael Uzcátegui (Provea), entrevistamos a Mireya Lozada, directora de «Aquí cabemos todos». Fuera del aire nos preguntábamos ¿Quién tendrá en su poder las pinturas que hacía Hugo Chávez? ¿Las tendrán en una bóveda para venderlas en un futuro o quizá alguna de sus hijas las guarde en el país de turno donde residen fuera de Venezuela? No dimos con la respuesta y aunque ese imaginario revolucionario nos quitó buen rato, recordé que me importaba poco dónde estuviesen y quién tenga las pinturas del fallecido ex presidente y decidí plantearle una interrogante, que parece estar también en la cabeza de muchos cuando gritan: «Así haya un cambio de gobierno este país no se arregla, ni que pasen 20 años». Me detuve un segundo y le dije: pero, profesora, ¿hay solución para Venezuela? Y sí, sí la hay.

    Las cosas, que aunque parecieran obvias no lo son, pero ojo, no voy a transcribir la entrevista, si deseas escucharla puedes estar pendiente del twitter del programa, @_HumanoDerecho, pero el punto al que quiero llegar, es que la desesperanza de un cambio yace sin fundamento ante la real posibilidad de progreso que tenemos en nuestras manos, y aunque la tortura de estos años se nos hace eterna, porque parecen años de perro, cuando en el futuro veamos hacia atrás, 17, 18, 19 o 20 años de miseria no son nada para lo que las páginas en los libros de historia están acostumbradas, podemos sobreponernos a esto siempre y cuando juguemos a la convivencia, al respeto porque tendremos un mismo proyecto: Venezuela.

    Si las millones de personas en el planeta vieran a través del mismo par de ojos sería un lugar muy aburrido, En el país necesitamos un mismo objetivo, mucha gente ha muerto, muere y morirá gracias a las decisiones y políticas de este gobierno, las cuales tienen que ser intencionales o por el corte mínimo, ahí hay culpables por complicidad u omisión, esos crímenes no prescriben y nadie tiene tan efectividad asesinando a un pueblo por error. Cambiando al que administra la justicia, podremos sanear el sistema penal, cuando cambiemos al que controla las cárceles, cambiaremos a los privados de libertad, cuando desde el Ejecutivo se escuche al pueblo y no se le persiga, Venezuela será otra, tú serás otro. Esto tiene arreglo, pero, como dicen, primero lo primero, saliendo el payaso e inmediatamente nosotros, soltando la carcajada. Nuestra venganza será ser felices.